Industria

SECTOR CALZADO: INDECOPI AMPLÍA POR 5 AÑOS LOS DERECHOS ANTIDUMPING

Sobre las importaciones de todas las variedades de calzado (sin incluir chalas y sandalias) con la parte superior de caucho o plástico y cuero natural, de China.

El 12 de setiembre, el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) amplió por un plazo de cinco años la vigencia de derechos antidumping sobre las importaciones de todas las variedades de calzado (sin incluir chalas y sandalias) con la parte superior de caucho o plástico y cuero natural, originario de China.

Los argumentos expuestos por la entidad para mantener esta medida son “proteger” la producción nacional de calzado. Esto no es algo nuevo, ya que, durante los últimos 26 años, los derechos antidumping han venido aplicándose y serán injustamente extendidos una vez más hasta 2026.

En ese sentido, considerar como solución medidas proteccionistas, que afectan al consumidor en artículos esenciales para su bienestar, como el calzado, significa que los peruanos seguiremos pagando un monto fijo adicional por cada zapato que se importa.

Entre tanto, mientras que los costos para los consumidores se han encarecido, lo único que se ha conseguido es un ingreso para Indecopi, ya que, de acuerdo con la Resolución 205-2022/CDB-INDECOPI, son 21 subpartidas arancelarias de calzado detalladas en la resolución, las cuales están afectas a derechos, en condición de multa[1] que se cobran, lo que convierte a la institución en juez y parte. Así, a julio de 2022, el monto recaudado por pago de estos derechos ascendió a US$ 63.7 millones. Cabe resaltar que, en los primeros siete meses del presente año, se ha cobrado la suma de US$ 3,590,687.

Por un lado, no hay evidencia de que la industria de calzado local haya dado un gran salto gracias a la aplicación de esta medida, como lo indica el Indecopi. Si se revisan los datos de producción, según información del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), el PBI real de la fabricación de cuero y calzado ha tenido subidas y bajadas en la última década, donde la producción se encuentra entre los S/ 800 millones y S/ 1,000 millones. Salvo en 2020, el PBI bajó de este rango y fue igual a S/ 596 millones, el cual es explicado por la crisis de la pandemia de la Covid-19.

En cuanto al comercio exterior, según cifras de la Sunat, las exportaciones de calzado (capítulo 64 del código arancelario) perdieron su tendencia ascendente desde 2014, y retrocedieron a un valor de US$ 13.8 millones en 2020 y a una recuperación de US$ 20.2 millones en 2021. Por otro lado, las importaciones del calzado se recuperaron en 2021 al adquirirse un total de US$ 474 millones; sin embargo, aún se encuentra un 4% por debajo de los niveles prepandemia.

Aunque los argumentos del Indecopi se basan en el “perjuicio” que las importaciones generan a la industria nacional, hay que resaltar que, pese a la aplicación de medidas antidumping, la producción no ha variado en los últimos años. Asimismo, se evidencia que no existe una oferta consolidada de la producción nacional para suplir las necesidades del mercado peruano, por lo que no se puede decir que la falta de crecimiento o volatilidad en los niveles de producción nacional se deba solo a las importaciones, como se expone.

No obstante, lo que sí generaría este tipo de medidas es perjudicar nuestras relaciones con socios tan importantes como China, lo cual puede afectar a nuestro sector exportador e, incluso, causar graves riesgos para el país

Es claro que las medidas proteccionistas no han ayudado a la producción nacional y, por el contrario, no se conoce cuánto ni cómo han contribuido al sector calzado. Los resultados no han sido los que claramente propone el Indecopi y se desconocen los beneficios de haber mantenido por tanto tiempo esta política, cuando lo único tangible es un mayor costo para todos los peruanos y mayores ingresos para dicha institución.

La industria del calzado se enfrenta a varios desafíos; por ello, potenciar la competitividad de la industria del calzado va a resultar trascendental en los próximos años. Al respecto, algunos de los pilares deben estar enfocados en la innovación, a partir de la implementación de incentivos para que las empresas del rubro adopten y se apropien de nuevas tecnologías para mejorar su productividad, fortalecer la cadena de valor y lograr que más empresas sean más resilientes. Por ello, es hora de que los empresarios exijan juntos competitividad, no proteccionismo. Millones de familias no podemos pagar la protección de unos pocos.

[1] Decreto Supremo Nº 006-2003-PCM: Reglamento sobre Medidas Antidumping y Compensatorias.