Minería

22 AÑOS DE “LUCHA” CONTRA LA MINERÍA ILEGAL: UN FRACASO ABSOLUTO

Existen entre 300,000 y 500,000 personas operando en actividades de minería artesanal y pequeña escala, pero apenas 18,561 son formales

El resto opera al margen de la ley y, en algunos casos, incurre en actividades delictivas ¿Qué han hecho las autoridades en todo este tiempo? 

La Ley N° 27651, aprobada en 2002, fue el primer intento por regular las actividades de minería artesanal y de pequeña escala (MAPE). Esta asignó a los Gobiernos regionales la responsabilidad del proceso de formalización. Posteriormente, se creó el Plan Nacional para la Formalización de la Minería Artesanal, en 2011, y el Procedimiento Extraordinario de Formalización para la MAPE, en 2012. 

El Registro Integral de Formalización Minera (Reinfo) fue creado en 2016. Originalmente, estableció un plazo de tres años de vigencia para el proceso de formalización de la MAPE. Sin embargo, esta disposición se extendió por dos años más en 2019, lo cual volvió a ocurrir en 2021, con una extensión adicional por tres años. Los que quieran formalizarse, tienen hasta el 31 de diciembre de 2024 para cumplir con este proceso, a menos que el Gobierno renueve el plazo una vez más.

Esto tiene severas consecuencias, debido a que en marzo de este año se aprobó la ley N.o 31989, la cual impide que la policía incaute el material utilizado en la minería ilegal (artefactos o materiales explosivos), restando aún más fuerza a la lucha contra este delito. La indiferencia del Estado ante este problema ha sido catalogada como un escudo de impunidad para la actividad ilegal, según el Observatorio Contra la Minería Ilegal, de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía, y el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú. 

¿CÓMO ESTAMOS HOY?

El Estado sigue ignorando este problema. Actualmente, se debate en el pleno el dictamen que recae en los proyectos de ley 2172/2021-CR, 2519/2021-CR, 3621/2022-CR y 5171/2022-CR, que impedirían procesar por minería ilegal a los inscritos en el Reinfo mientras la inscripción esté vigente, incluso si se encuentran en estado vencido, otorgándoles hasta 90 días hábiles adicionales. Además, según la normativa peruana, la minería informal sin autorización solo recibe sanciones administrativas, pero no se considera un delito. 

Entre 1985 y 2017 se perdieron 95,750 hectáreas (ha) de bosque en la Amazonía suroriental peruana por causa de la minería aurífera (recurso abundante en la zona), según el Centro de Investigación Científica Amazónica (CINCIA). La mayoría de esta pérdida se explicó por la actividad artesanal con 62,202 ha, equivalentes al 62.9% de la selva perdida en esta zona; mientras que el resto corresponde a mediana y gran minería (35,550 ha; 37.1%). 

Según estimaciones más recientes del Proyecto de Monitoreo de la Amazonía Andina (MAAP), entre enero 2021 y marzo 2024 se perdieron en la misma zona 30,846 ha de bosque, de las cuales 8,090 ha (26.2%) se encuentran fuera del corredor minero, un área donde la minería artesanal y de pequeña escala es permitida (bajo cumplimiento de las regulaciones establecidas por ley). Es decir, esta última cifra es consecuencia de únicamente la actividad ilegal. El resto (22,756 ha; 73.8%) se encontraría dentro del corredor minero, siendo difícil el separar formales, informales e ilegales.  

Los resultados del Reinfo son igual de lamentables. A casi ocho años de su inicio, solo figuran 18,561 registros vigentes de 84,518. Esto significa que apenas el 22% de los mineros registrados durante este periodo han logrado formalizarse, lo que evidencia el fracaso de este proceso.

A nivel departamental, Arequipa posee el mayor número de mineros registrados con 16,260, de los cuales solo 3,823 (23.5%) se encuentran en estado vigente. A este le siguieron Puno (12,127 mineros registrados; 3,964 vigentes; 32.7% del total) y Madre de Dios (9,007; 1,686; 18.7%). 

Estos resultados se multiplican si consideramos el universo de mineros ilegales e informales que ni siquiera figuran en el Reinfo. Según un estudio de la organización Capital Humano y Social Alternativo, la fundación alemana Konrad Adenauer Stiftung y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), hasta 430,000 mineros ilegales ni siquiera habrían sido identificados por el Reinfo. Solo en Madre de Dios existirían 40,000 mineros informales e ilegales, según un estudio de USAID. 

Los resultados expuestos corresponden a cifras de deforestación y avances de formalización. Sin embargo, las redes de la minería ilegal no se limitan a las zonas donde operan. Según la campaña del colectivo País Seguro, estas actividades se extienden a nivel nacional, y promueven delitos como la extorsión, el sicariato y la trata de personas. 

Hoy por hoy, es poco creíble que la situación mejore solo con cambiar las leyes, cuando la capacidad y la voluntad política del Estado de hacer que estas se cumplan sigue siendo la misma: nula. ¡¿Hasta cuándo?! (ComexPerú)